Sí, hay gente como el genial personaje que trazó Borges hace 65 años en Ficciones. Gente con la memoria perfecta, gente que recuerda exactamente que hizo tal dia a tal hora, como iba vestido, que había alrededor....
Esta historia la he recordado en el tiempo ese que transcurre entre la cena y eso que te levantas a comer a las tantas de la noche, a lo que hay que poner un nombre formal ya. Hablando con una amiga sobre la rabia que nos da no acordarnos de cuando pasó tal o cual cosa de la que no ha pasado ni un año, de la que confundes con otra situación similar, de la que no te acuerdas si estaba fulanito o menganito presente...etc
Todo, Brad Williams puede recordar absolutamente todo lo que ha vivido. Natural de La Crosse, Wisconsin, locutor de radio de profesión recuerda todo desde pequeño. "Siempre he sido una especie de Google para mi familia".
Brad se dio cuenta de que su peculiaridad podría no ser única y ser digna de estudio cuando, hace un par de años, leyendo un artículo de la Universidad de California sobre el caso de una mujer de 40 años, llamada AJ (de la que solo he encotrado por toda la web esas iniciales, no ha trascendido su nombre, pero ha sido objeto también de muchos estudios), que podía recordar cada detalle de su vida en los últimos 25 años, se dirigió hacia California para poder averiguar un poco más de ella.
En realidad, Williams sufre una afección rara de la que se conocen muy pocos casos: hipertimesia", o lo que es lo mismo, una incapacidad para olvidar que le mantiene inexorablemente atado a su pasado. Solo hay actualmente tres casos constatados en el mundo de personas con este tipo de afección.
Los científicos del Centro de Neurobiología del Aprendizaje y la Memoria de la Universidad Irvine de California están estudiando detenidamente su cerebro para comprender cómo se produce este fenómeno, que puede parecer un sueño para los olvidadizos como puede ser mi caso.
Eric Williams, su hermano pequeño ha realizado una película documental, Unforgettable , en el que Brad compite con Google contestando a 20 preguntas del tipo "quién era el ministro de finanzas en 1985" "quién ganó el Óscar a actor secundario en 1974" "o qué marca hizo el campeón de los 400 metros lisos en 1980". El hombre contra la máquina.
¿El vencedor? Williams. 18 respuestas correctas en unos 11 minutos menos que el buscador. El trailer de la película es el siguiente:
Esta historia la he recordado en el tiempo ese que transcurre entre la cena y eso que te levantas a comer a las tantas de la noche, a lo que hay que poner un nombre formal ya. Hablando con una amiga sobre la rabia que nos da no acordarnos de cuando pasó tal o cual cosa de la que no ha pasado ni un año, de la que confundes con otra situación similar, de la que no te acuerdas si estaba fulanito o menganito presente...etc
Todo, Brad Williams puede recordar absolutamente todo lo que ha vivido. Natural de La Crosse, Wisconsin, locutor de radio de profesión recuerda todo desde pequeño. "Siempre he sido una especie de Google para mi familia".
Brad se dio cuenta de que su peculiaridad podría no ser única y ser digna de estudio cuando, hace un par de años, leyendo un artículo de la Universidad de California sobre el caso de una mujer de 40 años, llamada AJ (de la que solo he encotrado por toda la web esas iniciales, no ha trascendido su nombre, pero ha sido objeto también de muchos estudios), que podía recordar cada detalle de su vida en los últimos 25 años, se dirigió hacia California para poder averiguar un poco más de ella.
En realidad, Williams sufre una afección rara de la que se conocen muy pocos casos: hipertimesia", o lo que es lo mismo, una incapacidad para olvidar que le mantiene inexorablemente atado a su pasado. Solo hay actualmente tres casos constatados en el mundo de personas con este tipo de afección.
Los científicos del Centro de Neurobiología del Aprendizaje y la Memoria de la Universidad Irvine de California están estudiando detenidamente su cerebro para comprender cómo se produce este fenómeno, que puede parecer un sueño para los olvidadizos como puede ser mi caso.
Eric Williams, su hermano pequeño ha realizado una película documental, Unforgettable , en el que Brad compite con Google contestando a 20 preguntas del tipo "quién era el ministro de finanzas en 1985" "quién ganó el Óscar a actor secundario en 1974" "o qué marca hizo el campeón de los 400 metros lisos en 1980". El hombre contra la máquina.
¿El vencedor? Williams. 18 respuestas correctas en unos 11 minutos menos que el buscador. El trailer de la película es el siguiente:
Aunque yo no creo que me gustase a mí tener esta capacidad. Hay muchas cosas que hacen que la falta de memoria, las hace tener más magia, hacemos crecer los buenos recuerdos...... no ,no creo que yo quisiera tenerla.
Y a vosotros ¿Os gustaria compartir con Brad y A.C. su cualidad?
Y a vosotros ¿Os gustaria compartir con Brad y A.C. su cualidad?
Hasta hace unos seis años (debe ser que desde entonces voy mucho más estresada y mi neurona no rinde al 100%), yo misma era poseedora de una memoria prodigiosa.
ResponderEliminarPuede parecer un comentario de alguien sobrado, pero yo no lo veo así, era un hecho y la gente que me ha rodeado desde siempre así lo puede atestiguar. Algunas amigas incluso cuando necesitaban un dato me usaban como agenda, y más en épocas sin internet, aunque la mayoría eran datos referidos a nuestra vida en común: "Mariajo, ¿qué día fue aquel que fuimos a Vlc y pasó tal y cual?" "- ¿mmm, el día que tú ibas con el jersey lila y el vaquero negro?" - "sí, ese, ese!" "- pues el 23 de junio de 1989".
Recordaba los nombres y apellidos de todas y cada una de las personas que se habían cruzado en mi vida, sus teléfonos si es que me los habían dado, datos que me habían dado en cualquier circunstancia, incluso en una noche de marcha, como fechas de nacimiento. Este hecho llamaba mucho la atención porque luego veía a esa persona y la felicitaba por su cumple, cuando ni ella misma recordaba haberme dado ese dato.
No os creáis que eso me enorgullecía, me sentía bastante bicho raro en ocasiones, y el hecho de recordar todo, absolutamente todo tiene como contrapartida que igual recuerdas lo bueno con detalle como lo malo con detalle.
Sobre el hecho de que sin memoria se hacen "crecer los recuerdos y le añadimos magia", no estoy para nada de acuerdo, ya que por recordar datos exactos, ropa e incluso conversaciones enteras, no dejamos de tener memoria selectiva y recordar luego un todo adaptado a cómo lo vivimos cuando sucedió. Obviamente, si algo me sucedió a los quince, lo recuerdo con el pensamiento y las sensaciones de mis quince, no con los de ahora, no sé si me explico.
Empecé a notar que esta "facultad" menguaba cuando dejé de dormir bien al nacer mi hijo, y luego el tener que estar siempre pendiente de él en mis horas en casa no ayudan demasiado a que mis vivencias se vayan guardando íntegras.
Uff.. yo creo que no me gustaría... y eso que tengo buena memoria (sin llegar al caso del comentario anterior, desde luego...) pero creo que no... Y en realidad no sé explicar muy bien por qué, puesto que la memoria no ocupa lugar...
ResponderEliminarComo nos pasa a muchos, mi memoria es tremendamente emocional... así que imagino que quizás es por eso... Así me ahorraría ciertas emociones.
Supongo que lo conoces, pero por si acaso no, creo que te gustarían mucho los libros de Olver Sacks. Es un neurólogo, muy buen ensayista y divulgador (muy accesible) que habla siempre en sus libros de casos como los que comentas, dándoles una dimensión humana tremenda.
La mujer AJ que mencionas es al parecer Jill Price (mencionan esas iniciales en el texto)
ResponderEliminarhttp://www.cabovolo.com/2009/12/jill-price-la-mujer-que-no-puede.html